Las estrías, aunque no representan un riesgo para la salud, pueden ser una preocupación estética considerable para muchas personas. Su tratamiento no es sencillo, ya que estas cicatrices resultantes de la ruptura de las fibras de colágeno y elastina en la piel son notoriamente difíciles de eliminar por completo. Sin embargo, existen varios tratamientos no quirúrgicos que han demostrado ser efectivos para reducir su apariencia. A continuación, se presentan algunos de los enfoques más utilizados y con evidencia científica de su eficacia.
¿Por qué salen las estrías?
Las estrías son marcas visibles en la piel que resultan del estiramiento rápido de la misma, un proceso que puede ser desencadenado por varios factores. La aparición y la gravedad de estas marcas dependen de diversos elementos, como la genética, los niveles hormonales, y la velocidad con la que se produce el estiramiento. A continuación, se detallan algunas de las causas más comunes de las estrías, respaldadas por datos estadísticos que reflejan la prevalencia y los mecanismos subyacentes.
1. Crecimiento rápido
Durante la adolescencia, es común experimentar un crecimiento acelerado, con tasas de aumento en la altura que pueden superar los 10 centímetros al año en algunos casos. Este crecimiento rápido puede estirar la piel de manera súbita, superando su capacidad de adaptación y resultando en la formación de estrías. Se estima que entre el 70% y el 80% de los adolescentes desarrollan estrías durante esta etapa, siendo más comunes en mujeres que en hombres.
2. Aumento o pérdida rápida de peso
Los cambios bruscos en el peso, ya sea ganancia o pérdida, son una causa frecuente de estrías. Cuando la piel se estira o contrae rápidamente, las fibras elásticas situadas en la dermis pueden romperse, lo que conduce a la aparición de estas marcas. Aproximadamente el 40% de las personas que experimentan una rápida pérdida de peso, como en el caso de las dietas extremas o la cirugía bariátrica, desarrollan estrías. Por otro lado, la ganancia rápida de peso, como la observada en el 50% de las personas con obesidad, también es un factor de riesgo significativo.
3. Embarazo
El embarazo es una de las causas más comunes de las estrías, especialmente en áreas como el abdomen, los senos y los muslos. Alrededor del 90% de las mujeres embarazadas desarrollan estrías durante el tercer trimestre, cuando el bebé crece rápidamente y la piel se estira para adaptarse al aumento de volumen. La severidad de estas estrías puede estar influenciada por factores como la genética y el tipo de piel.
4. Uso de corticoides
El uso prolongado de corticoides, ya sea en forma de cremas o medicamentos orales, puede debilitar las fibras de colágeno en la piel, aumentando la susceptibilidad a la formación de estrías. Estudios muestran que hasta un 25% de las personas que utilizan corticoides tópicos a largo plazo desarrollan estrías. Este efecto secundario es particularmente común en áreas donde la piel es más fina, como la parte interna de los brazos y los muslos.
5. Factores genéticos
La predisposición genética es un factor crucial en la formación de estrías. Si hay un historial familiar de estrías, es más probable que una persona las desarrolle. Se estima que la herencia genética puede explicar entre el 30% y el 80% del riesgo de desarrollar estrías, dependiendo de otros factores asociados como el tipo de piel y el estilo de vida.
6. Síndromes y enfermedades
Algunas condiciones médicas, como el síndrome de Cushing y el síndrome de Marfan, están asociadas con un mayor riesgo de desarrollar estrías. En el caso del síndrome de Cushing, donde hay un exceso de cortisol, hasta el 80% de los pacientes presentan estrías distintivas de color púrpura. Por su parte, el síndrome de Marfan, que afecta el tejido conectivo, también lleva a la formación de estrías en un alto porcentaje de casos, incluso sin un estiramiento significativo de la piel.
7. Aumento de masa muscular
El aumento rápido de masa muscular, común entre personas que levantan pesas o practican culturismo, puede estirar la piel lo suficiente como para causar estrías. Esto es particularmente común en jóvenes atletas, donde hasta el 35% de los hombres que levantan pesas desarrollan estrías en áreas como los hombros, los brazos y la espalda. El uso de esteroides anabólicos para acelerar el crecimiento muscular puede aumentar aún más este riesgo.
Cómo quitar las estrías con tratamientos no quirúrgicos
Estos son algunos de los tratamientos que yo he probado o que he escuchado opiniones de mis amigas y pacientes que les han funcionado:
1. Cremas y lociones
Las cremas y lociones son uno de los primeros tratamientos a los que recurren las personas para tratar las estrías, y con razón. Algunos productos tópicos contienen ingredientes activos que pueden mejorar la elasticidad y apariencia de la piel, aunque sus efectos suelen ser limitados a las estrías más recientes.
- Retinoides: Derivados de la vitamina A, los retinoides como el tretinoína son conocidos por su capacidad para estimular la producción de colágeno y acelerar la renovación celular. Un estudio publicado en Journal of the American Academy of Dermatology encontró que la aplicación de tretinoína al 0.1% puede mejorar significativamente la apariencia de las estrías recientes (estrías rubra).
- Ácido Hialurónico: Este compuesto es conocido por su capacidad para retener grandes cantidades de agua, lo que hidrata profundamente la piel y mejora su elasticidad. Se ha demostrado que el ácido hialurónico, cuando se combina con otros tratamientos, puede reducir la visibilidad de las estrías.
- Centella Asiática: Este extracto vegetal ha sido utilizado tradicionalmente en la medicina asiática por sus propiedades curativas. Se cree que promueve la producción de colágeno y mejora la cicatrización, lo que puede ser beneficioso para reducir la apariencia de las estrías.
- Manteca de Cacao y Vitamina E: Aunque la evidencia científica es limitada, muchos usuarios informan mejoras en la textura de su piel con el uso regular de productos que contienen estos ingredientes. La manteca de cacao es conocida por su capacidad hidratante, mientras que la vitamina E tiene propiedades antioxidantes que pueden apoyar la salud general de la piel.
2. Microdermoabrasión
La microdermoabrasión es un procedimiento que utiliza microcristales para exfoliar las capas más superficiales de la piel, promoviendo la regeneración celular. Este tratamiento es particularmente útil para mejorar la textura de la piel y reducir la profundidad de las estrías, especialmente en su fase inicial.
Un estudio publicado en Dermatologic Surgery indicó que la microdermoabrasión puede ser efectiva para reducir la apariencia de estrías rubra al aumentar la producción de colágeno en las capas subyacentes de la piel. Sin embargo, para obtener resultados óptimos, son necesarias múltiples sesiones.
3. Peelings químicos
Los peelings químicos implican la aplicación de una solución ácida, como ácido glicólico o ácido láctico, que exfolia la piel al eliminar las células muertas y estimular la producción de colágeno. Este tratamiento puede mejorar la textura de la piel y hacer que las estrías sean menos notorias.
Según un artículo en Journal of Clinical and Aesthetic Dermatology, los peelings químicos de mediana profundidad pueden mejorar la apariencia de las estrías, especialmente cuando se combinan con otros tratamientos como el láser o la microdermoabrasión. Los resultados son graduales, y se requiere tiempo y sesiones repetidas para observar mejoras significativas.
4. Terapia con láser
La terapia con láser es uno de los tratamientos más avanzados y efectivos disponibles para las estrías. Existen diferentes tipos de láseres utilizados para este propósito, como el láser fraccionado y el láser de colorante pulsado.
- Láser Fraccionado: Este tipo de láser crea microperforaciones en la piel, lo que estimula una respuesta de curación que aumenta la producción de colágeno y elastina. Estudios han demostrado que este tratamiento puede reducir significativamente la profundidad y visibilidad de las estrías blancas (estrías alba).
- Láser de Colorante Pulsado: Este láser es más efectivo en las estrías rubra, ya que se enfoca en los vasos sanguíneos subyacentes, ayudando a desvanecer el enrojecimiento y estimulando la producción de colágeno.
La terapia con láser es costosa y puede requerir varias sesiones para lograr los resultados deseados. Además, como cualquier procedimiento médico, puede tener efectos secundarios, como hinchazón, enrojecimiento o cambios temporales en la pigmentación de la piel.
5. Radiofrecuencia
La radiofrecuencia es un tratamiento que utiliza energía de radiofrecuencia para calentar las capas profundas de la piel, estimulando la producción de colágeno y elastina. Este proceso no solo mejora la firmeza de la piel, sino que también puede reducir la visibilidad de las estrías.
Un estudio publicado en Journal of Cosmetic Dermatology mostró que la radiofrecuencia puede ser efectiva para tratar las estrías, especialmente cuando se combina con otros tratamientos como la microdermoabrasión o el láser. Los pacientes suelen observar una mejora en la textura de la piel y una reducción en la apariencia de las estrías después de varias sesiones.
6. Carboxiterapia
La carboxiterapia es un tratamiento relativamente novedoso que implica la inyección de dióxido de carbono (CO2) en la piel. Este gas aumenta el flujo sanguíneo y mejora la oxigenación de los tejidos, lo que puede estimular la regeneración de la piel y reducir la apariencia de las estrías.
Aunque la evidencia científica sobre la carboxiterapia es aún limitada, algunos estudios preliminares sugieren que puede ser efectiva para mejorar la elasticidad y la apariencia de la piel afectada por estrías. Los resultados pueden variar, y generalmente se requieren múltiples sesiones para observar una mejora notable.
7. Terapia fotodinámica
La terapia fotodinámica utiliza una combinación de luz pulsada intensa o láser y un agente fotosensibilizante para tratar las estrías. Este tratamiento es particularmente útil para las estrías recientes, ya que la luz estimula la producción de colágeno y elastina, mejorando la textura y el tono de la piel.
Un estudio en Lasers in Surgery and Medicine mostró que la terapia fotodinámica puede ser una opción efectiva para las estrías rubra, con pacientes que experimentaron mejoras significativas en la apariencia de sus estrías después de varias sesiones. Sin embargo, este tratamiento también puede ser costoso y requiere la supervisión de un dermatólogo especializado.
