La industria de la belleza, que no únicamente de la moda, es una industria que genera millones y millones de beneficios al año. Durante décadas ha ido evolucionando adecuándose a las demandas de la sociedad. Diferentes cánones de belleza que han determinado desde una nueva forma de maquillarse hasta un nuevo concepto de cuerpo, no sólo en el mundo de la mujer; y es que a lo largo de la historia también hemos visto una clara evolución en la moda masculina. Con el nuevo año y con unas tendencias que rompen radicalmente con los cánones de hace 30 años, la pregunta es clara ¿hacia dónde camina la industria de la belleza?
Una evolución en cuerpo y moda
Nada tiene que ver la estética actual con la estética que veíamos en los años 60, 70, 80 o incluso en los 90. Es cierto que en las pasadas décadas se dejó claro que los cánones habían cambiado y que, por ejemplo a partir de los 80, las mujeres que veíamos en las pasarelas cada vez eran mujeres más delgadas. La belleza de los 90 nos hablaba de mujeres con rasgos andróginos, mientras que el hombre ideal dejaba a un lado su aspecto más rudo para dar visibilidad a los rasgos más femeninos, rostros casi infantiles.
Durante estas décadas la mujer vio como su cuerpo tenía que convertirse en algo que muchas veces su propia estructura corporal no era capaz de conseguir. Una delgadez extrema que, aunque no se exigía tanto al hombre, también terminó por pasar factura a esa parte de la población.
El body positive que lo cambió todo
Fue a partir de 1996 cuando el body positive lo cambió todo. Las feministas Elizabeth Scot y Connie Sobczak impulsaron este movimiento gracias a publicaciones como la revista Belleza XL. El paso ya estaba dado, era momento de querernos tal y como éramos.
Durante las primeras décadas de los 2000 hemos visto un proceso de cambio radical en el que las pasarelas y las grandes firmas apuestan por cuerpos reales. Mucho cuidado, pues esto no significa apostar únicamente por tallas grandes. Es cierto que durante un tiempo el movimiento se centró en esta parte, pero actualmente, y aquí es hacia donde se dirigirá el 2023, el body positive no va de eso. Este movimiento va de todo tipo de tallaje, de altura y de grosor. Una aceptación por parte del individuo, pero también de los fabricantes que deben crear diferentes colecciones para hombres con un tallaje mayor o más altas, así como para las mujeres.
Un 2023 más sostenible
No sólo nos encontramos con prendas para todo el mundo, también nos encontramos con rostros y cuerpos que intentan alcanzar los cánones de belleza de una forma más sostenible.
No podemos negar que en nuestra época hay una preocupación enorme por nuestro planeta y por la sostenibilidad en general. Esto puede estar en equilibrio con preocupaciones tan mundanas como los productos antiedad, anticaída o la protección solar. Ahora bien, para ello, la industria de la belleza da un paso más y se encarga de apostar por los productos orgánicos.
Las empresas de medio mundo han empezado a plantearse la innovación en otros términos, por lo que el desarrollo de los nuevos productos para este año y para los siguientes siempre irá
de la mano de ingredientes orgánicos y procesos de elaboración amables con el medio ambiente.
